
Hoy después de mucho tiempo ha salido el sol, aunque parezca mentira, tratándose de Málaga, pero llevamos un principio de año que no ha dado tregua, casi todos los días llueve, así que aprovechando la ocasión, he salido a dar un paseo con Caramelo. Después de un rato de monta, me encuentro por el camino a mi amigo y vecino Paco, quien todos conocemos en Málaga, por su vida tan ligada al mundo del caballo como Paco “el Taxista”. No hay cosa que le guste mas a nuestro amigo, que una buena jaca y durante sus 84 años de vida, ha tenido tiempo de tener unas cuantas de las mas variadas razas, en estos momentos se decanta por los hispano árabes, busca jacas mucho mas templadas y que no den problemas. Cuando vio a Caramelo, al que no conocía, con su son de mosquero, me invito a pasar a su casa como siempre, allí tiene centenares de arreos inimaginables y un guadañes muy especial. La mayoría de sus piezas son únicas y hechas a mano por él. En primer lugar nos muestra una montura vaquera, la cual ha forrado entera con telas y borlas típicamente rondeña. Además le ha añadido su manta estribera a juego, y por ultimo le ha puesto una pechara por la parte delantera con flecos rojos y otra igual en la parte trasera, bordeando así todo el caballo.